domingo, 21 de febrero de 2010
CONCENTRACION DE LAS FAMILIAS DE PRASUR
Nueva concentración de los trabajadores de Prasur junto a sus familias para reclamar los salarios e indemnizaciones que le adeuda la empresa utrerana Grupo Prasur desde hace más de un año.
Al grito de “Prasur, ¿Dónde está nuestro dinero?” se concentraron en la mañana del sábado 20 de febrero los trabajadores del Grupo Prasur en la localidad de Utrera junto a sus familias y a los sindicatos de CNT y FAS para reclamar la deuda que la empresa mantiene con los trabajadores desde diciembre de 2008. Los trabajadores denuncian que a pesar de tener una sentencia firme del Juzgado de lo Social para que se les pague las indemnizaciones correspondientes al despido desde el mes de agosto de 2009, y pese a que la empresa recibió en ese mismo mes, más de un millón de euros en forma de Aval de la Junta de Andalucía a través de la Agencia IDEA dependiente de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa, el Grupo Prasur sigue sin hacer efectivo el pago que le requiere la justicia. Además los trabajadores reclaman los salarios adeudados, que en algunos casos son desde diciembre del año 2008.
Durante la concentración, los manifestantes leyeron un comunicado donde pedían, ante la desesperación de las familias, la mediación urgente de la Delegación de Empleo y de la Consejería de Innovación para llegar a una solución viable de este conflicto, y para que se haga un seguimiento y una valoración por parte de los Organismos Oficiales, del dinero público entregado a esta empresa que según los trabajadores “ha hecho un uso fraudulento de este dinero, al no destinarlo al uso para el que estaba aprobado”.
El Grupo Prasur, es una empresa utrerana, dedicada a la construcción de módulos prefabricados, así como cubiertas para edificios. Esta empresa nº 1 en su sector en España, ha llegado a tener hasta 300 trabajadores, facturando desde 2004 a 2006 tan sólo con una de sus empresas más de 30 millones de euros. Actualmente cuenta con una plantilla de unos 50 trabajadores, y pese a seguir funcionando, no hace frente al pago de las deudas con sus trabajadores despedidos.
miércoles, 10 de febrero de 2010
CONCENTRACIÓN ANTE LA DELEGACIÓN DE EMPLEO DE SEVILLA
Cada día tenemos más claro que este sistema favorece al que tiene y porque lo ayuda con cifras millonarias, pero a los que no tenemos nada, nos dejan en el paro y sin un euro en el bolsillo. Por eso queremos reunirnos con la Delegación de Empleo, para pedirles responsabilidades y que nos digan ¿Dónde está el dinero de esa ayuda?¿Dónde está nuestro dinero?
lunes, 19 de octubre de 2009
Reunión de los trabajadores de Prasur con la Consejería de Innovación
Tras la concentración, una delegación de trabajadores se reunió con dicha Consejería, para pedir información, sobre esta “Ayuda de salvamento”, tanto de su gestión y seguimiento, como de cantidades y plazos en los que se pagaría a los afectados por los impagos.
Los trabajadores comunicaron a la Consejería las deudas que la empresa aún mantiene con la mayoría de los trabajadores, a pesar de tener resolución judicial; así como la discriminación que está haciendo Prasur en los pagos a los trabajadores denunciantes, tanto de los que lo hicieron de forma particular como de los afiliados a la CNT.
Por su parte, la Consejería se mostró interesada por los datos aportados en la reunión, y se volverá a reunir, la semana que viene, con una representación de los trabajadores para ampliar y profundizar en esta cuestión, ya que las informaciones que han tenido hasta ahora han sido solamente las aportadas por la empresa y UGT, que han omitido cuestiones importantes para resolver este conflicto, que dura desde diciembre del año pasado.
Enlace al video en youtube: http://www.youtube.com/user/cntsovutrera#p/a/u/0/UHbjUl7aBd0
lunes, 5 de octubre de 2009
Los trabajadores de Prasur piden justicia
Este pasado sábado, una veintena de trabajadores de la empresa Grupo Prasur junto a sus familias y a los sindicatos CNT y FAS se han concentrado en la Plaza del Altozano de Utrera, para reclamar que hasta el día de hoy, siguen sin cobrar. Los trabajadores denuncian que la empresa ha recibido el dinero del aval de la Junta de Andalucía, pero que está haciendo una gestión discriminatoria de este dinero público destinado al pago de todos los trabajadores, ya que pagan a unos y a otros no, con un criterio poco claro. Todo esto, a pesar de tener, según informan los trabajadores “una sentencia firme donde se demanda judicialmente el pago de lo que se les adeuda”.
Esta situación está asfixiando a unas familias que han estado sobreviviendo con la ayuda de las donaciones solidarias nacionales e incluso internacionales de la CNT, y de muchas personas anónimas, todo ello, gracias a la constancia de su lucha y a la solidaridad.
Los trabajadores finalizaron el acto con varios mítines donde se hacía hincapié en una llamada al “apoyo mutuo entre los trabajadores” y clamando que “no pararán con la lucha hasta que se les pague el último céntimo”.
jueves, 1 de octubre de 2009
CONCENTRACION DE LAS FAMILIAS DE PRASUR
"Practica el apoyo mutuo: Hoy por mi mañana por ti"
lunes, 28 de septiembre de 2009
RUEDA DE PRENSA SOBRE EL CONFLICTO PRASUR
Durante la rueda de prensa se agradeció al sindicato FAS y a todas las personas anónimas que se han solidarizado con las familias de Prasur, e informó que la justicia les ha dado la razón en el juicio celebrado a finales de julio, donde se pedía la desvinculación de los trabajadores con la empresa y las indemnizaciones correspondientes, demostrando así, según nos dicen “que la fuerza de la razón ha estado siempre de su parte”.
Asimismo, informan que hasta el día de hoy los trabajadores de CNT “no han cobrado ni un céntimo del dinero que se les adeuda entre salarios atrasados e indemnizaciones por la desvinculación”, extendiéndose este problema a otros trabajadores que denunciaron de forma particular, e incluso a los que recibieron pagos en forma de pagarés al inicio de los problemas de impagos.
Ante estos hechos CNT se pregunta que ¿Por qué están cobrando unos trabajadores y otros no? ¿Cuál es el criterio que está siguiendo la empresa Prasur para pagar? Así como se cuestionan ¿Cuál es el problema ahora, para pagar habiendo sido dado el préstamo avalado por la Junta de Andalucía?
Finalizaron la rueda de prensa pidiendo una administración por parte de la Junta de Andalucía del dinero público con el que ha sido avalado la empresa Prasur; así como mayor coordinación y agilidad entre la Consejería de Empleo y Justicia para que se haga efectivo el pago de las sentencias. Para reclamar tal fin, anuncian que pedirán una reunión con el Delegado de Empleo para hacerle estas y otras cuestiones y exigirle que se les pague por fin a los trabajadores.
VIDEO SOBRE LA NOTICIA
http://www.youtube.com/watch?v=B-eT39HQPo8
lunes, 13 de julio de 2009
Entrevista con compañeras y madres de los trabajadores de Prasur
El tren nos lleva hasta la localidad sevillana de Utrera, donde se ubica el Grupo Prasur, empresa dedicada a la fabricación de cubiertas y módulos. Desde el año 2008 ha visto reducida su plantilla en un tercio contando actualmente con más de 100 trabajadores que empezaron a sufrir atrasos en el pago de sus salarios desde mayo de 2008. A partir de diciembre de ese año, Grupo Prasur no ha pagado ni una sola nómina. Ellos siguen acudiendo cada mañana a defender su puesto de trabajo mientras sobreviven en condiciones cada vez más duras. Nos hemos citado con un grupo de compañeras y madres de trabajadores de esta empresa, con la que CNT mantiene un conflicto desde hace varios meses.
Nos interesa compartir con ellas sus opiniones y experiencias en torno a esta lucha, mostrar a través de esta entrevista una voz fundamental en este y todos los conflictos –y muchas veces invisible-: la de las mujeres que unen sus fuerzas a la de los trabajadores afectados, que se lanzan a pelear codo a codo contra las injusticias, que asumen como propia y convierten en colectiva una lucha que se suma a todas las que ya llevan adelante en su vida cotidiana.
¿Cómo os encontráis en estos momentos?
- En la vida pensábamos que iba a llegar a tanto. Creíamos que iba a durar, como mucho, dos meses, como la otra vez.
- Hay días buenos, hay días malos... Hay días en los que una tiene los ánimos mejor. Otros… depende de las situaciones…
- Yo soy madre de un trabajador. Por culpa de ese hombre, ha perdido mi hijo su casa. No se la han llegado ni a entregar siquiera. Le dieron una vivienda de protección oficial y, claro, trabajando, no había ningún problema y tenía su hipoteca aprobada. Y a la hora de firmar le dijo el Banco que no. Que como estaban las cosas en Prasur, mi hijo tenía que renunciar a su vivienda. Le toca una vivienda, le sigue trabajando a ese señor y la pierde. Y es lo que más te duele. ¿Estando trabajando y que tú pierdas tu casa? A ver cómo se come eso.
- Yo no sabía nunca en la vida dónde nos íbamos a meter. Yo nunca me he visto así. Cuando llevábamos un mes en esta situación, mi marido estaba entre firmar o no firmar, y yo le decía, firma ya y te quitas esto de encima. Nosotros nunca hemos tenido dinero. Qué más nos va a dar no tener. Pero luego llegó y me dijo: mira, vamos a ir a un sindicato [CNT] a ver lo que nos dicen. Y cuando tuvieron la primera reunión, vino y me dijo, yo vengo muy bien…
- Fueron muy claros explicando las cosas, lo que no ocurrió con las primeras reuniones que tuvimos con la UGT. Hubo dos, con todos los trabajadores. No fueron claros, pares y nones. Ni dijeron lo que podía suponer. La política de la UGT es como el avestruz, esconder la cabeza. Y no puede ser.
- Y entonces cuando me dijo que él ya no quería firmar, ya fue cuando me vine abajo, me hinché de llorar y le dije, pues si tú no firmas, ya no se firma, aunque sea que nos alumbremos con una vela. ¿No quieres firmar? No firmes, pero esto va a ser un camino largo. Aquí vamos a pasar lo nuestro. Pero para adelante. Y ya no me vuelvo para atrás.
¿Sentís algún tipo de responsabilidad como madres o mujeres de trabajadores?
- Somos más responsables, porque tú eres la que lo tienes que animar y la que llevas la casa.
- Es que tú llevas el carro, chiquilla, con ayuda de ellos, pero es que ese carro tú tienes que empujarlo para adelante. Ahora te sientes mal, porque dices, con qué poco me estoy aviando ahora, con los dineros que hemos cobrado estos años atrás, que nunca nos llegaba, y ahora que no tenemos nada y nos estamos aviando. Con más necesidades que antes, claro está, porque antes no tenías la necesidad de esperar al mes que viene para comprar los deportes a la niña.
- Lo peor es tener que pedirlo y, ¿a quién se lo pides? Está todo el mundo igual. Porque el que tenga familia que pueda ayudarlo, sí, pero el que no, ¿a quién acude? Porque el Banco no te da una mano, sino que te pone el pie.
- Me siento responsable de no haber insistido en que firmara y en que lo hubiese dejado. Estaríamos como estamos, posiblemente. Ya se hubiese pasado por juicio, hubiéramos cogido el dinero que se hubiese cogido y estaríamos de otra forma.
- Todas: ¡O no!
¿Pensáis que ellos son conscientes del peso que lleváis vosotras?
- Sí, muy conscientes.
- Yo creo que mi marido no hubiera seguido para adelante si yo no estoy aquí.
- Yo creo que las mujeres son el puntal de la casa. Independientemente de que alguno la lleve, yo creo que las mujeres lo son… para lo bueno y para lo malo.
Ellos sienten que repercute en su entorno…
- Mi marido lleva mal los cumpleaños de los hijos, se ha quedado sin regalar y eso para él... Mi marido tiene la pena de no poder comprar regalos. A las manifestaciones y a las concentraciones viene toda la familia por delante. Pero mi niño tiene quince años y le ha dado vergüenza que vengan mis hermanas a casa a traerme mandados. Mamá, ¿tan mal estamos que tienes que ir a pedir mandados? Nunca nos habíamos visto así.
¿Cómo es vuestro día a día?
- Esperar a que lleguen las dos y pico de la tarde y decir: ¿novedades?
- La gente de la CNT nos ha levantado mucho el ánimo. Y nos apoyamos unas a otras. Mira, por decirte una cosa, no he podido comprar medicinas que necesita mi hija, porque las mías son más prioritarias. Cuando ya estemos mejor, podré comprar su tratamiento para el estómago. Por eso te digo que…
¿Vosotras cómo os organizáis, os veis diariamente?
- Prácticamente nos vemos todas las tardes. Ahora que no está el local, nos vemos menos, como no hay donde reunirse… [A principios de abril, el SOV de CNT-Utrera fue desalojado de los locales de Patrimonio Sindical Acumulado a instancias de la UGT]. Nos conocíamos casi todas, a alguna más de vista que otra cosa, y ahora, como todas estamos viviendo la misma situación, sabemos lo que hay, las necesidades que tenemos, sabemos comprendernos.
- Y a veces no hace falta ni hablar.
- Con la mirada ya sabemos que…
¿Cómo valoráis el apoyo del sindicato CNT?
- Vamos a las reuniones, y ya con afecto, como de la familia. Además, se han entregado tanto desde el principio, sin ningún tipo de interés. La CNT no tenía muchos afiliados aquí, hemos crecido y hemos echado los dientes juntos.
- Nos han dado apoyo moral, a veces, más que la familia.
- La verdad es que no me esperaba tanta ayuda.
¿Hasta dónde estáis dispuestas a llegar?
- Hasta el final. Hasta que digan, venga, mira, que ya lo tenemos todo ingresado. Pues se acabó. Pero mientras esto no se arregle, vamos a estar ahí. ¿Qué hay que ir a su casa? Pues a su casa vamos. ¿Qué hay que venir aquí? ¿Qué hay que dar tres vueltas al pueblo? Pues las damos, sin problemas, lo que hay que hacer lo vamos a hacer hasta que nos paguen el último céntimo.
¿Y ellos tienen tan claro como vosotras ese “hasta el final” rotundo?
- Todas: Sí.
- Hasta el final, hasta ver al Aguilar [Administrador del Grupo Prasur] andando sin coche y a la mujer sin descapotable.
- Yo no pido mal a nadie, sólo que deberían verse cinco meses como estamos nosotros, que se sientan como nosotros nos sentimos, sin nada. Porque la mujer [de Aguilar] fue a la barriada a comprar el pan y dijo que no era para tanto lo que estábamos armando. Que con todo el dinero que habíamos ganado, que hubiésemos ahorrado.
- Mi mayor recompensa sería ve al Aguilar trabajando junto a mi marido, como un trabajador normal, mano a mano. Que se vea dependiendo de un sueldo.
- ¿Y no va diciendo que él por las tardes ponía tornillos? Él no ha puesto un tornillo en su vida.
- Eso es más flojo que un pobre harto de comer.
¿Por qué pensáis que el resto de trabajadores de Prasur que están en la misma situación no están luchando de la misma manera?
- Por miedo, por miedo a quedarse sin trabajo.
- No levanto mucho la voz a ver si esto se puede solucionar.
- O que lo solucionen otros y yo sigo aquí.
¿Qué consecuencias pensáis que va a tener este conflicto en vuestras vidas?
- Darme cuenta de lo que es Utrera, de lo que somos todos, que se salve el que pueda, que no apoyamos a nadie.
- Ese es uno de los comentarios que yo le hice a mi marido. Insistía en que nadie se movía. Y le dije, mira, solidarios no hemos sido nunca, ahora nos ha tocado vivirlo y nos estamos dando cuenta, pero cuando ha habido algún problema en Utrera, ¿dónde estabas tú? En el sofá. ¿Dónde estaba yo? En el trabajo. ¿Dónde estaba la otra? En su sofá. No, nos ha tocado ahora y nos estamos dando cuenta de que no somos solidarios. Le dije a N. [miembro del SOV de CNT-Utrera] que yo no entendía de política, porque nunca he entendido, pero sí tengo muy claro que me afilio a la CNT y que cuando haga falta salir por algún motivo, que me llamen, que estoy ahí.
¿Si hubierais sido vosotras las despedidas habríais hecho la lucha de otra manera?
- Yo le hubiera dado más caña a ese hombre [Aguilar].
- Hubiera empezado la lucha mucho antes, cuando empezaron los primeros atrasos en mayo del año pasado. Antes se cobraba el día uno, del uno pasaron al cinco, del cinco al ocho y del ocho al once… Ahí es cuando la UGT tenía que haber empezado a darle palos al empresario y haberle dicho, ¿qué ocurre?
- Yo soy de las que me sentaría en una silla delante de su casa y ahí me quedo y cuando se levante para llevar a su niño al colegio que me vea, cuando venga a almorzar, que me vea, no le tengo miedo. Lo que pasa es que no puedo hacer la mitad de las cosas por mi marido, porque él es más de genio que de otra cosa, y tú no puedes hacer de esto un problema personal, es un problema general.
¿Alguien lidera esta lucha?
- Siempre hay alguien que se retiene un poquillo más, por su forma de ser, pero encuentra otro apoyo más fuerte y venga para adelante. Pero aquí todo el mundo está en igualdad de condiciones, todo el mundo opina, todo el mundo es fuerte, y cuando no es fuerte, lo hacemos fuerte entre todos.
¿Cómo mantenéis la fuerza para continuar con esto?
- Yo es que tengo mucha facilidad de autocontrol. Cuando veo que el nudillo sube y baja y llega la angustia, me va entrando la pena y lloro, ya después, cuando me he desahogado, pasan cinco minutos, me limpio las lágrimas y, ea, a cantar.
- Me pongo la radio y me pongo a cantar.
¿Cómo pensáis que va a terminar este conflicto?
- La esperanza no se pierde. Esto va a terminar bien, porque vamos a ganar, y le vamos a decir al Aguilar, ea, pues adiós.
- Si nosotros no cobramos lo que tenemos que cobrar, entonces es cuando…
- Entonces… hasta aquí llegó la cosa, me van a tener que meter presa. A mi hijo no le quitan el piso porque tú no me quieras pagar.
¿Qué esperáis de CNT?
- Son los únicos que nos apoyan y hacen que nos movamos, porque nosotras no sabíamos nada… yo quiero hacer esto, y te dicen, hasta allí no, o hasta aquí, y si seguís hasta allí podéis tener esos problemas. Y problemas los que tenemos ya, los justitos.
- Ellos asesoran y nosotros decidimos.
- Todos los pasos son decisión nuestra, nos asesoran porque en esto nosotros… por ejemplo, no se pueden concentrar más de veinte personas, nosotros eso no lo sabíamos, fíjate… si vais aquí os escuchan más, vamos a ir allí…
- Como el día del Pleno, eso fue un puntazo, estaba allí Francisco Jiménez [Alcalde de Utrera] y nos presentamos todos con carteles.
- Y la acampada en la puerta del Ayuntamiento también estuvo muy bien, cuándo nos íbamos a ver nosotras en una de esas, a hablar con “Don” Francisco Jiménez, sin pedir audiencia ni nada, sino ahí, toma. Y luego el concierto…
- Como estamos acostumbradas a trabajar, el concierto tampoco nos supuso mucho, al contrario, lo pasamos muy bien…
¿Estáis orgullosas?
- Todas: Mucho.
- Yo no pensé que me iba a soltar la melena tanto.
- Cuando en el concierto nos subimos al escenario y todo el mundo nos aplaudió, ella…
- Me morí de pena.
- Yo estoy muy orgullosa de ser como soy y de tener la gente que tengo y ya nunca un paso atrás, ya no, ya tengo la cabeza como un adoquín y todos para adelante.
Nos quedamos charlando un buen rato más. Mientras, varias niñas juguetean a nuestro alrededor y se acercan para pedirnos que escribamos que quieren “más acampadas”. Una de las mujeres nos cuenta que su hija ha correteado por todos los sitios con huchas para los trabajadores de Prasur. “Ha pedido hasta a la Guardia Civil”. Otra de ellas dice que para los chiquillos, a veces, es como un juego, aunque “están implicados lo mismo que nosotros”. Estas mujeres, luchadoras, confiesan con un nudo que casi puede tocarse, que la cuestión de los hijos es una de las más duras en este conflicto.
Cuando regresamos en el tren, con todas sus palabras grabadas, sentimos que con nosotras también viaja, como una fuerza solidaria, esa esperanza dura que se lee en sus ojos.